El verdadero descubrimiento viene en el último párrafo. Cito: "Lo extraño del fenómeno es que se trató del impacto de un meteorito con luz diurna, algo que sólo ocurre cada muchos años, según apuntó el neozelandés Alan Gilmore, del observatorio Mount John de la Universidad de Canterbury."
Toma ya.
Aplicando las pocas luces que me quedan a esta hora de la tarde, llego a un callejón deductivo sin salida. Por favor, amigos, ayudadme a decidir qué es lo que ha pasado:
1.- El neozelandés Alan Gilmore, del observatorio Mount John de la Universidad de Canterbury, trabaja en el citado observatorio como encargado de sacudir los asientos de los astrónomos. Además, el redactor de la noticia no llegó a saber de qué va un meteorito, y ojo, no hablo de cursos de postgrado, sino más bien pareciera que no pasó de parvulitos (Si, en mi época se llamaba "párvulos", ahora es "educación infantil").
2.-El redactor, además de no tener ni idea, es un mentiroso, porque pone en boca de un astrónomo de mentirijillas tamaña sandez.
(Ahora, cuidadín, ninios, que hay palabros y conceptos de dos rombos)
3.- El redactor no tiene ni idea, y además, el tal Gilmore trabaja de astrónomo, lo que me lleva a preguntarme sobre
Seguid divirtiendonos...
3 comentarios:
¿Os habeís dado cuenta del nombre del astronomo? GIL - MORE.
(Lo siento no he podido evitarlo
¿Os habeís dado cuenta del nombre del astronomo? GIL - MORE.
(Lo siento no he podido evitarlo
¿Os habeís dado cuenta del nombre del astronomo? GIL - MORE.
(Lo siento no he podido evitarlo
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